Historia
La creación de este
deporte se remonta a 1930 en Uruguay. La selección de Uruguay había ganado el
Campeonato del Mundo y la medalla de oro en los Juegos Olímpicos, viviéndose
por ello en el país de una auténtica fanatización por el fútbol.
Debido a la falta de campos libres en las calles de
Montevideo, los niños comenzaron a jugar fútbol en campos de baloncesto. El
fútbol de salón nació el 8 de septiembre de 1930 en Montevideo de la mano del
profesor Juan Carlos Ceriani. Él, utilizando los salones de gimnasio de la
Asociación Cristiana de Jóvenes (YMCA), dibujó con tiza las porterías en la
pared, para luego comenzar a utilizar las porterías de waterpolo.
El Fútbol de Salón se
basó en el balonmano, el baloncesto, e incluso el waterpolo, para redactar las
primeras reglas de un nuevo deporte. Algunas de las que se adoptaron fueron:
cinco jugadores en el campo (baloncesto), duración del partido de 40 minutos
(baloncesto), porterías pequeñas (balonmano), medidas del campo (balonmano) y
reglamentación relacionada con los porteros (waterpolo).
En 1965, se creó la
Confederación Sudamericana de Fútbol de Salón, primera organización
internacional de este deporte. Ese año también se disputó el primer campeonato
sudamericano de selecciones. La Federación Internacional de Fútbol de Salón
(FIFUSA), fue fundada en 1971 en Sao Paulo, Brasil; siendo la primera de su
tipo en el mundo. Esta organización realizó en 1982 el primer mundial del
deporte y posteriormente otros seis más.